viernes, 23 de septiembre de 2016

mente nublada de luciérnagas

la noche te arropa traviesa al asomarte por la ventana de tu cuarto, tejedor. ves el traslúcido vestido del viento bailar en tu patio.

intentas acompañarle con un silbido, pero en un pestañazo se espanta y tropieza con las hojas secas acumuladas en un rincón del frío pavimento.

las hojas calan en los brazos del viento acariciando al señor acostado en la banca de hierro del parque. ese roce trae al anciano memorias de los besos en la mejilla de aquella mujer que le preparaba panqueqyes al mediodía.

llueve.
cae del cielo.
son las lágrimas del anciano que cayeron sobre las hormigas que llevaban migas a su casa.

todo esto pasó en un minuto, tejedor.
y tú... sigues pegado a la ventana observando al viento bailar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario